Las tuberías de agua constituyen la columna vertebral de nuestro sistema de suministro y consumo de agua, fabricadas en una variedad de materiales como acero inoxidable, cobre o plástico.
Desde la década de 1970, ya no se utilizan tuberías de plomo debido al riesgo de contaminación del agua y los efectos perjudiciales para la salud que pueden causar al ser ingeridos. Dada la amplia variedad de opciones disponibles, es crucial comprender las diferencias entre los distintos tipos de tuberías de agua. En este artículo, vamos a explorar estas diferencias para ayudarte a tomar decisiones informadas sobre qué tipo de tubería es más adecuado para tus necesidades.
Conoce los tipos de tuberías para el agua y las diferencias competitivas y de uso entre estos:
Y es que cuando se trata de sistemas de fontanería en el hogar, entender las diferencias entre las tuberías de agua fría y caliente es crucial. No solo es importante para garantizar un flujo de agua seguro y eficiente, sino también para maximizar el rendimiento de tus instalaciones.
A continuación te presentamos los tipos de tubería, según la temperatura del agua:
Tuberías de agua fría:
- PVC (Policloruro de vinilo): es el material más comúnmente utilizado para tuberías de agua fría debido a su durabilidad y resistencia a la corrosión. Es fácil de instalar y económico, son probablemente las tuberías más utilizadas en la actualidad.
- PEX (Polietileno reticulado): una opción más flexible y versátil, ideal para instalaciones en áreas con cambios de temperatura extremos. Se mantiene en el ranking de las tuberías más utilizadas. La principal diferencia con el PVC es su mayor flexibilidad.
- PER (polietileno reticulado): conocido por su resistencia y durabilidad excepcionales. Comparadas con las tuberías de PVC estándar, las tuberías PER son más resistentes y tienen un mayor contenido de cloro, lo que las hace más seguras y menos propensas a afectar la calidad del agua.
Aquí te presentamos algunas de las ventajas de las tuberías de plástico:
- Resistentes a la corrosión: los tubos de plástico mantienen su integridad estructural frente a la corrosión.
- Flexibilidad y facilidad de instalación: la flexibilidad de los tubos de plástico los hace fáciles de manipular y colocar en cualquier proyecto de fontanería.
- Costo accesible: Son una opción económica en comparación con otros materiales de tubería.
- Instalación rápida: los sistemas de unión para tubos de plástico facilitan y agilizan la instalación del sistema de agua.
- Fácil limpieza: la limpieza de las tuberías de agua de plástico es sencilla, ya que a menudo solo requiere desenroscar.
- Compatibilidad con diferentes tipos de agua: el plástico es adecuado para tratar todo tipo de dureza de agua.
- Libres de óxido: las tuberías de agua de plástico no se corroen ni se oxidan.
- Superficie lisa: Su superficie lisa evita la acumulación de cal y suciedad en el interior de los tubos.
- Resistencia a ácidos y cal: son resistentes tanto a ácidos (alcalinidad del agua) como a la cal, lo que garantiza una larga vida útil del sistema de tuberías.
Cobre: tradicionalmente utilizado en sistemas de fontanería, el cobre es duradero y resistente a la corrosión, pero puede ser más costoso que otras opciones.
Se emplea en diversas aplicaciones, como instalaciones de gas, sistemas de calefacción y fontanería. La soldadura de tuberías de cobre demanda cierta destreza manual, lo que aumenta los costos de instalación y requiere la intervención de profesionales especializados, como fontaneros. En la actualidad, los componentes para unir secciones de tuberías suelen ser accesorios de conexión a presión, tales como rectas, desviaciones o ramificaciones.
Anteriormente, la conformación de las tuberías implicaba costos elevados, pero gracias a los accesorios de conexión a presión, se ha vuelto una alternativa rentable tanto en términos económicos como de tiempo.
No obstante, las tuberías de cobre no son recomendables si el pH del agua potable es demasiado bajo (menor a 7), ya que esto podría representar riesgos para la salud.
Por consiguiente, es vital realizar inspecciones regulares en este tipo de tuberías de agua para garantizar su funcionamiento adecuado y mantener la seguridad de los usuarios.
Tuberías de agua caliente:
CPVC (Cloruro de polivinilo clorado): es el material más común para tuberías de agua caliente debido a su resistencia al calor y durabilidad.
PEX (Polietileno reticulado): también se utiliza ampliamente en sistemas de agua caliente debido a su flexibilidad y capacidad para resistir altas temperaturas. Es un tipo de polietileno que soporta temperaturas de hasta 95º C y una presión de hasta 4 bares.
Acero galvanizado: aunque menos común en la actualidad, el acero galvanizado se utilizaba anteriormente en sistemas de agua caliente. Es resistente, pero puede corroerse con el tiempo.
La principal desventaja del acero radica en su escasa resistencia a la corrosión, ya que puede oxidarse fácilmente al entrar en contacto con el aire y la humedad, llegando incluso a corroerse por completo.
Por esta razón, las tuberías de acero requieren una protección superficial, comúnmente mediante el proceso de galvanizado, que consiste en recubrir el metal con una capa de zinc u otro material.
Estas tuberías son especialmente adecuadas para el suministro de agua caliente y suelen tener una vida útil más prolongada en comparación con otros tipos de tuberías.
El acero galvanizado, siendo un material tradicional para tuberías, ha evolucionado con el tiempo y las versiones modernas se consideran generalmente seguras para su uso en sistemas de agua potable.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que pueden surgir problemas de salud si el agua suministrada es corrosiva debido a un pH bajo.
Por lo general, estas tuberías se utilizan principalmente en instalaciones al aire libre, ya que suelen tener un diámetro mayor en comparación con otros tipos de tuberías.
Modos de uso:
Las tuberías de agua fría suelen alimentar grifos, inodoros, lavadoras y sistemas de riego, mientras que las tuberías de agua caliente son utilizadas para suministrar agua a calentadores de agua, grifos de agua caliente y sistemas de calefacción.
Ventajas y desventajas:
Tuberías de agua fría:
Ventajas: son más económicas, fáciles de instalar y no requieren de aislamiento térmico.
Desventajas: no son adecuadas para altas temperaturas y pueden romperse con el tiempo si se exponen a condiciones extremas.
Tuberías de agua caliente:
Ventajas: son resistentes al calor, duraderas y adecuadas para aplicaciones de alta temperatura.
Desventajas: son más costosas que las tuberías de agua fría y pueden requerir aislamiento térmico para evitar la pérdida de calor.
Entender las diferencias entre las tuberías de agua fría y caliente es esencial para cualquier proyecto de fontanería. Al seleccionar el material adecuado y comprender su uso y mantenimiento, pueden garantizar un sistema de fontanería seguro, eficiente y duradero en tu hogar o lugar de trabajo.
Recuerda consultar a un profesional si tienes alguna pregunta o necesitas asistencia con tu sistema de fontanería. ¡Asegúrate de mantener tus tuberías en buen estado y disfruta de un suministro de agua seguro y confiable en todo momento!